La educación contribuye a que las personas crezcan y maduren como seres humanos en sociedad. Así, su fin es ayudar a que se produzca el desarrollo físico, afectivo, social e intelectual de los alumn@s.
Se potencia la transmisión de aquellos valores que favorezcan la libertad personal, la responsabilidad, la ciudadanía democrática, la tolerancia, la igualdad de derechos y oportunidades: un crecimiento y madurez paulatinos que colabore con los alumn@s –sean de donde sean- para que en un futuro sean personas sanas y felices.
Por ello, la educación sensorial es básica en la formación de los niños ya que es de nuestro propio cuerpo del que partimos para conocernos y conocer el entorno que nos rodea y con el cual nos interrelacionamos.
El desarrollo de los sentidos, la atención y observación del ambiente nos permitirá construir la base sobre la que, gradualmente, poder conseguir una adaptación plena al ambiente en el cual se está viviendo.
Así, en este blog hago referencia a aspectos culturales de cada país pues son éstos los que nos identifican. ¿y qué más fácil que dar a conocer a una tierra a través de un plato de cocina? ¿Porqué no acercarnos al lugar del cual llega alguno/a de nuestros alumno/as gracias a un cuadro? ¿Cómo no idear todo un país por medio de una foto o un relato?.
Sin embargo, ningún “sentido” es mejor que el sonido: los sonidos son el medio de expresión más usado por el niño (junto con el movimiento) y son una de las primeras manifestaciones de expresión de la comunicación de los pequeños. Recordad que el ritmo de nuestro corazón es binario, y sin su latido no hay vida. Creo que no cabe duda de que la expresión artística favorece la sensibilidad, la manifestación creativa que en realidad es expresión de lo que uno es.
Y nada mejor que la música. Podemos no ser capaces de entender la lengua de nuestro nuevo amigo pero “sentir” su música, o cualquier música … afortunadamente contamos con ella para saltar barreras y acercarnos.
Así, incluyo obras en cada uno de los países a los que nos vamos acercando y que son prueba de lo mucho que me gusta. ¡espero que a vosotros también!
Me parece muy acertado este aspecto que destacas entorno a la multiculturalidad ya que tanto el cuerpo (su movimiento, su expresión, etc) como la música rompen barreras comunicativas y nos acercan un poquito más a otras cultura.
ResponderEliminarHay muchas maneras de trabajar la multiculturalidad en nuestras aulas, pero que mejor manera que trabajar la inclusión a partir de conocer las raíces de cada uno de nuestros alumnos? Seguro que de manera transversal trabajaremos muchisimos valores como por ejemplo el respeto, tolerancia, etc
Animo con tu bloc, me parece de gran interés!!
Laura